Ante la declaración de restauranteros y hoteleros respecto a que suspenderán de manera definitiva el servicio del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Cuernavaca (SAPAC), debido a que están pagando por un servicio con el que no cuentan, el alcalde José Luis Urióstegui, mostró desinterés sobre esta problemática que enfrentan los empresarios.

“Es una decisión personal que todos pueden tomar, y no tengo más que decirles. Si alguien decide cancelar su toma, lo puede hacer”, comentó el edil de Cuernavaca.

Lo anterior derivado de que algunos empresarios dieron a conocer que promoverán amparos contra el SAPAC para evadir los altos cobros del servicio que desde hace cerca de un año no reciben.

Rodrigo López Laguardia, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-ServyTur), indicó que desde hace un año diferentes empresarios gastan hasta 30 mil pesos mensuales en la compra de pipas y al menos 10 de los afectados solicitaron su cancelación de contrato con el SAPAC.

En caso de que los 190 empresarios suspendan el servicio, se estimó que el ingreso que perdería la red de agua potable sería de aproximadamente 40 mil pesos bimestrales.

Por otro lado, los afectados agregaron que pidieron una reunión con la titular de SAPAC, Evelia Flores, para que se les condonen los recibos de cobro que les han llegado durante ese año y no recibieron el suministro de este vital líquido.

Con información del Diario de Morelos